Ojos grandes para ver mejor el mundo de los humanos…
De chico quise tener un caballo para mi solo y nunca llego la ocasión. Hoy en el club hípico puedo disfrutar de algunas horas de monta de caballos y quien sabe montar coincidirá conmigo que la experiencia es única y muy placentera…
La equitación en las ciudades tiene también uso terapéutico en pacientes de parálisis cerebral, síndrome de Down, autismo, disfunción cerebral infantil y muchos otros trastornos físicos y emocionales…
Los caballos son realmente misteriosos, nobles y sencillos. Guardan en su mirada un respeto y profundidad únicos.
ResponderEliminarSaludos, me encantó la foto.
Preciosa mirada, tan dócil y sensible...
ResponderEliminarMaravilloso hobbie el tuyo. Te envidio.
Un abrazo, amigo
Gran toma compañero es casi una pintura.
ResponderEliminarde tierna mirada y noble corazón, me encantó!
ResponderEliminarUna foto con un perfecto detalle de esa tierna mirada.
ResponderEliminarSaludos.-
Divina foto, amigo. Justo ahora que estoy escribiendo sobre los caballos a duo con una amiga...me viene al dedo para inspirarme más. Me la llevo a mi blog y dime si la puedo poner en el librito que vamos a publicar...
ResponderEliminarSabes que cuando yo era pequeñita me asomaba y me pasaba horas contemplando al caballo del lechero de mi barrio...me extasiaba viéndole los ojos y las pestañas tan grandes...y la magia que tenía para mover los párpado, la piel y la cola para sacudirse de las mosquillas...
Me has traído hermosos recuerdos con esta imponente foto de un solo ojo del caballo.
Siempre te seguiré...
abrazos...tu amiga
powerful!
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